36>>¿DEBO EVITAR LAS SITUACIONES TENTADORAS?








"Tendré siempre tabaco a mano"
No fumaré, pero me sentiré más seguro
 si sé que está allí”




He sido bastante dogmático en mis consejos hasta ahora, y prefiero que trates todo lo que digo más como una serie de instrucciones que como consejos. Soy dogmático porque lo que digo es el resultado del estudio de miles de casos reales, y sé que tengo razón.


Sin embargo, cuando se trata de evitar o no evitar las situaciones en la que uno puede sentirse tentado, me resulta más difícil ser dogmático. Cada fumador tendrá que decidirlo él mismo. Al mismo tiempo, puedo hacer un par de comentarios que espero sirvan.


Repito que fumamos toda la vida por miedo, y ese miedo tiene dos fases claramente distinguibles


 ¿Cómo voy a poder vivir sin tabaco?
Este miedo es aquella sensación de pánico que se apodera de ti cuando ves que se te van a acabar los cigarrillos y que los bares y las tiendas están cerrados. Este pánico no es resultado del “mono”, sino de la sensación psicológica de dependencia —que no eres nadie si no tienes tabaco. El miedo llega a su punto culminante cuando fumas tu último cigarrillo, que es precisamente cuando estás aliviando al máximo el “mono”.


Es miedo a lo desconocido, el mismo miedo que se siente cuando uno aprende a tirarse al agua desde un trampolín. El trampolín está a medio metro del agua, y parece que está a tres metros. Hay dos metros de agua, y parece como sí sólo hubiera un palmo. Se necesita coraje para tirarse. Estás convencido de que te vas a partir el cráneo. Ese primer salto es lo difícil. Una vez te has tirado, el resto es fácil.


Esto explica a su vez por qué algunas personas de mucha voluntad no tratan nunca de fumar, o cuando lo intentan no duran más que unas horas. Algunos de los que fuman 20 al día tratan de dejarlo, y encienden un cigarrillo en menos tiempo que si no se lo hubieran propuesto. La decisión les produce pánico, que es una forma de estrés. Inmediatamente se dispara el mecanismo mental —“Fúmate un cigarrillo”— pero ya no puedes, te has privado de algo, más estrés todavía, se dispara el mecanismo otra vez, hasta que se funden los fusibles y sacas tu paquete de tabaco.


No te preocupes, el pánico es sólo psicológico. Es el miedo a la sensación de dependencia. La gran verdad es que no dependes del tabaco, ni siquiera mientras te dure la adicción a la nicotina. No te asustes, confía en mí y tírate.




El segundo tipo de miedo es a más largo plazo, y es el temor de que ciertos momentos o ciertas situaciones perderán su valor o su gusto si no puedes fumar, o el no saber si vas a poder afrontar los momentos traumáticos de la vida sin tabaco. No te preocupes si tienes suficiente coraje para tirarte, verás que es un miedo sin fundamento.




Para evitar la tentación, se puede hacer una de estas dos cosas:

  • "Tendré siempre tabaco a mano. 
  • No fumaré, pero me sentiré más seguro si sé que está allí”.



He encontrado más fracasos con este sistema que con las personas que tiran todos sus cigarrillos. Creo que es porque si tienen un mal momento durante el periodo de retirada de la nicotina, es más fácil echar mano a un cigarrillo, mientras que si tienes que pasar la vergüenza que supone el tener que salir a comprar tabaco, será más fácil vencer la tentación, y de todas formas el momento habrá pasado antes de que llegues al estanco.
Pero también creo que el alto porcentaje de fracasos en estos casos se debe a que el fumador no está plenamente convencido en su decisión. 




Recuerda que hay dos elementos esenciales
0  La convicción.
Poderse decir: “Qué maravilla, ya no tengo que fumar más”. En cualquiera de los casos, ¿por qué tienes que tener tabaco? Si todavía sientes la necesidad de llevar un paquete de tabaco a todas partes, creo que deberías volver a leer el libro. Es probable que haya algo que no has captado bien.


0 ¿Debo evitar las situaciones de estrés, o las situaciones sociales, las fiestas, las comidas etc.?  Creo que sí, que durante el periodo de retirada de la droga, esas situaciones deben evitarse. No va a servir de nada someterse a unas presiones innecesarias. Pero aquí sólo me refiero a las situaciones de estrés. En cuanto a las situaciones sociales, creo que debes empezar a disfrutarlas del todo desde un principio. No necesitas el tabaco, aún mientras sigas enganchado con la nicotina. Ve a la fiesta y disfruta del hecho de que ya no necesitas fumar. Enseguida te demostrarás a ti mismo que uno se lo pasa mejor sin tabaco, y piensa en lo que vas a disfrutar cuando hayas matado definitivamente el monstruito y hayas eliminado de tu cuerpo todos esos venenos.








Recomienda este Blog

Tell a Friend




No hay comentarios:

Has Avanzado en Tu Meta de Dejar de Fumar???